La reforma a la educación se enfoca en un grado 12. Sin embargo, la propuesta tiene poco sustento y la evidencia muestra que las prioridades deberían ser otras.
Ángel Pérez Martínez*
¿Para qué el grado 12?
El Ministerio de Educación Nacional (MEN) presentó el borrador del proyecto de Ley Estatutaria que quiere regular el derecho fundamental a la educación.
El artículo 16 del proyecto contempla la posibilidad de incluir el grado duodécimo (12º) en los colegios. Esto facilitaría la articulación entre la educación media y la superior, y permitiría un acceso progresivo de los estudiantes a esta etapa educativa. Sin embargo, el artículo no menciona cuántos recursos se necesitarán ni cómo se garantizará el derecho a la educación con calidad.
El presidente ha insistido en la necesidad de crear el grado 12 en la educación media, sin que él tenga una idea clara de para qué. La iniciativa puede ser necesaria en el futuro, pero hay otros problemas en el sistema educativo que merecen ser revisados primero, como el de acceso y calidad a la educación básica y media.
No es razonable darle tanta prioridad a crear el grado 12 y sus implicaciones: nuevos recursos, dotaciones y demás acciones de política educativa como selección y nombramiento de nuevos docentes, personal de apoyo y administrativo.
Datos falsos
En su Twitter, el presidente aplaudió en 2013 la “iniciativa parlamentaria de generalizar el grado 12 y convertirlo en ciclo de educación superior en los colegios públicos”. En 2015, último año de su mandato como alcalde de Bogotá, reivindicó que “nuestro grado 12 en los colegios ya tienen casi 8000 jóvenes. 5000 se graduaron como tecnólogos en Bogotá Humana”.
Datos que son falsos. Colombia, ni ninguna entidad territorial, ha tenido tantos estudiantes matriculados en el grado 12. Los datos del DANE en 2022 muestran que en el país se matricularon 5669 estudiantes en el grado 12 y 3909 estudiantes en el grado 13. Para este año Bogotá solo reportó 58 y 56 estudiantes, respectivamente.
El Plan Nacional de Desarrollo establece como objetivo aumentar la tasa de cobertura en la educación media del 48.72 % al 65 % entre 2022 y 2026. Sin embargo, Colombia aún se encuentra lejos de alcanzar la meta de lograr una educación media con cobertura universal y de excelente calidad.
La mayoría de los estudiantes de los grados 12 y 13 pertenecen a las normales y reciben un programa de formación complementaria en convenio con una facultad de educación.
La propuesta del Banco Mundial y la OCDE
En un informe de 2012 sobre la educación superior en Colombia, la OCDE y el Banco Mundial propusieron “introducir un grado 12 de escolaridad o un año-puente opcional entre los estudios secundarios y superiores, y proporcionar a los estudiantes mejor información sobre cuáles son los programas más adecuados para ello”.
La propuesta buscaba resolver tres problemas:
- los bachilleres de Colombia tienen una formación escasa;
- los jóvenes terminan la educación media cerca de los 16 años,
- la deserción en la educación superior es alta.
Esto último podría explicarse por la baja calidad de la educación secundaria y media y la inmadurez cognitiva y emocional de los bachilleres.

Los retos de la política educativa
Sin duda, el sistema educativo en Colombia debe ser reformado. Especialmente, la educación básica y media oficial que representan el 81 % de la matrícula –7 874 927 estudiantes–.
Probablemente, cuando la actual organización escolar hasta el grado once se consolide, se podrán discutir otras opciones, por ejemplo, mejorar la educación inicial y empezar el pre jardín a los 4 años. Medidas que aportaría a un mejor cuidado de los niños y a la vez retrasarían la salida de los estudiantes del grado once a los 17 o 18 años.
Los principales retos a la hora de abordar la política educativa son:
- Cerrar las brechas de calidad. Los estudiantes de grado once de colegios privados tienen un desempeño de 30 puntos más que los estudiantes de colegios oficiales.
- Universalizar el acceso a los tres grados de preescolar. Es necesario crear por lo menos un millón de nuevos cupos. También, debe aumentarse la cobertura en la educación media oficial con 000 nuevos cupos.
- Mejorar la infraestructura educativa y las dotaciones tecnológicas de los colegios rurales. Más de 30.000 sedes educativas tienen menos de 50 estudiantes y están en pésimo estado. Menos del 25 % tienen conexión a Internet o carece de los equipos tecnológicos necesarios para mejorar el trabajo de los docentes con los estudiantes.
- Consolidar los procesos de formación de los docentes en los colegios y concentrar esfuerzos en los procesos de transformación pedagógica, desarrollo curricular y mejora del trabajo en equipo de los docentes en cada colegio oficial.
Una meta lejana
La decisión de ampliar hasta el grado 12 implica encontrar alternativas dentro de los colegios oficiales para que más de medio millón de estudiantes continúen su educación por un año adicional. La creación del grado 12 es una medida que conllevaría aumentar el número de estudiantes matriculados de 5669 en 2022 a, al menos, 600 000 estudiantes en 2026.
Según el DANE, en 2022 se matricularon 484 481 estudiantes en grado décimo en la educación oficial. El Plan Nacional de Desarrollo establece como objetivo aumentar la tasa de cobertura en la educación media del 48.72 % al 65 % entre 2022 y 2026. Sin embargo, Colombia aún se encuentra lejos de alcanzar la meta de lograr una educación media con cobertura universal y de excelente calidad.
De acuerdo con la Ley 115 de 1994, el propósito de la educación media es fomentar la comprensión de las ideas y los valores universales, así como preparar a los estudiantes para el ingreso a la educación superior y al mundo laboral. Pero los resultados de la prueba SABER 11 muestran que los estudiantes de grado 11 de los colegios oficiales sacaron, en promedio, 50 sobre 100 puntos en pruebas como lectura, ciudadanía y ciencias.
Pronto se cumplirán 30 años desde que se promulgó la Ley 115 en Colombia y aún no se ha logrado avanzar en la propuesta de contar con una educación media especializada para los grados décimo y once, la cual debería estar estrechamente articulada con la educación superior. Medida fundamental para orientar a los estudiantes en su proyecto de vida y prepararlos adecuadamente para integrarse al desarrollo social, político y económico del país.
Este estancamiento se debe a que la articulación entre la educación media especializada y la educación superior es costosa. Necesita desarrollos tecnológicos en cada colegio, según la especialización o las carreras articuladas entre el colegio y la institución de educación superior. Además, debe haber ajustes curriculares que respondan a las necesidades de los estudiantes y al contexto donde ellos viven, acompañados de un equipo de docentes preparados.
Universalizar la cobertura
El MEN debe analizar la capacidad de gestión y recursos para asegurar las propuestas de gobierno para los próximos tres años y establecer prioridades, como la conciliación del grado 12 y los desafíos de cobertura en educación superior, preescolar y media.
El compromiso de crear 500 000 cupos en educación superior es impostergable. Pero también es un gran reto en términos de acceso, ampliación de cobertura y construcciones de las sedes. Estas instituciones deben tener claro para qué se crean, dónde van a funcionar, cuáles van a ser las reglas de calidad, investigación, innovación y funcionamiento y cómo evitar la corrupción y el clientelismo.
Hasta la fecha, el MEN no ha presentado un plan que muestre cómo crearán 500 000 nuevos cupos en educación superior en los próximos tres años. En principio se conoce que se destinarán 9,2 billones de pesos adicionales para mejorar la educación superior oficial, distribuidos en 4,2 billones para financiar el déficit presupuestal de las instituciones de Educación Superior públicas y aumentar el número de matrículas gratuitas para los nuevos estudiantes.
Esto significa que el 88% de la matrícula en este grado es privada, lo que genera inequidades y exclusiones para los niños de familias con menos recursos.
Por otra parte, casi 5 billones se usarán para financiar el nuevo Plan de Infraestructura Educativa para la construcción de más de 100 nuevas sedes. Nótese que no se mencionan recursos adicionales para el grado 12 y los posibles procesos de articulación con los colegios
Mayor cobertura en preescolar
La propuesta de creación del grado 12 debería contrastarse con la ampliación de la cobertura en preescolar.
Diversos expertos y entidades como el Banco Mundial señalan los beneficios económicos sustanciales de invertir en programas de educación preescolar. Estos beneficios incluyen mejorar la calidad de la educación, reducir el abandono escolar en la adolescencia y disminuir las tasas de criminalidad en los jóvenes.
La siguiente gráfica relaciona algunas de las entidades territoriales con más población y con posibilidades de invertir con recursos propios. Se muestra cómo la matrícula oficial se consolidó en el grado de transición, pero es inexistente para los grados de prejardín y jardín, excepto en Bogotá:

En el grado pre jardín para 2022, se matricularon 86,793 niños pero solo 10,428 se matricularon en la educación oficial, el 12%. Esto significa que el 88% de la matrícula en este grado es privada, lo que genera inequidades y exclusiones para los niños de familias con menos recursos.
Cuando se compara la participación de las entidades territoriales, Bogotá tiene una participación del 70 % del total de la matrícula en los grados de prejardín y jardín. En ciudades como Medellín, Cali o Barranquilla la matrícula en estos grados es inexistente. Resalta el caso de Buenaventura, donde la calidad de la educación es muy baja, la deserción escolar de los adolescentes es alta al igual que la criminalidad.
En Buenaventura y en el resto del país, nadie responde la pregunta de hasta cuándo deberán esperar los niños para resolver los problemas que amenazan su futuro. No hay duda de que su bienestar está ligado a una educación inicial de buena calidad que incluya los tres grados de preescolar.
1 Comentario
Los niños son el futuro, para de nuestra sociedad. Por hay sé comienza.