El cuerpo humano ha sido un espacio creativo para expresar la protesta y para poner al poder en entredicho, tanto en las manifestaciones políticas que llevaron a la Primavera Árabe como en las protestas sociales de América Latina.
Héctor Herrera Santoyo*
The Naked Blogger of Cairo: Creative Insurgency in the Arab World
Marwan Kraidy
Harvard University Press, 2016
¿Qué pasó en la Primavera Árabe?
Mucho se ha escrito y especulado sobre el papel de los medios digitales y las redes sociales en la Primavera Árabe ocurrida entre 2011 y 2013. En el libro La bloguera desnuda de El Cairo, y con un enfoque sobre el cuerpo y sobre la política, sobre el arte y sobre el feminismo, los medios digitales y las redes sociales, la sátira y la islamofobia, Marwan Kraidy analiza las acciones de “insurgencia creativa” que tuvieron lugar durante esa “primavera”.
Según el autor, estas acciones incluyeron “dos tipos de violencia que se superponen y sostienen entre sí: la violencia por medio de palabras, canciones e imágenes, y la violencia por medio de llamas, pedradas y rifles, y ambas actuaron en tándem para desalojar a los dictadores”.
En la mañana del 17 de diciembre de 2010 Mohamed Bouazizi, un vendedor ambulante de Túnez, prendió su cuerpo en llamas como reacción contra el acoso de algunos funcionarios públicos que confiscaron sus medios de vida. Esta fue la chispa que encendió los levantamientos, revoluciones y movimientos sociales que se conocieron como la Primavera Árabe. Según Kraidy: "Al centrarse en las tecnologías más que en la interacción entre múltiples fuerzas, internas y externas, simbólicas y físicas, que formaron la rebelión de Túnez, esto fue una trampa que dio respuestas insatisfactorias. ¿Mejor es empezar por preguntar cómo era la vida para los tunecinos bajo el gobierno de Ben Alí?".
En 2011, masivas manifestaciones en Egipto llevaron a la caída del presidente Hosni Mubarak.
En 2011, masivas manifestaciones en Egipto llevaron a la caída del presidente Hosni Mubarak, quien había llegado al poder en 1981. Ese mismo año una mujer egipcia de 20 años, Aliaa Magda Elmahdy, publicó una foto que se tomó desnuda, una acción que describió en su Facebook como "un grito contra una sociedad de violencia, racismo, sexismo, acoso sexual e hipocresía". Ante la enorme cantidad de amenazas que recibió después de la publicación, Aliaa pidió asilo político en Suecia en 2013, donde luego realizó una acción en conjunto con el grupo Femen, del cual dimitiría poco después por inconformidad con algunos de sus métodos.
Todo esto es analizado por Kraidy, quien explica las similitudes y diferencias entre los casos de Aliaa Elmahdy y el de Samira Ibrahim, la mujer que presentó una denuncia judicial por haber sido víctima de una violación o "test de virginidad" durante su participación en una protesta en la Plaza Tahir en 2011.
Cuerpo y política
![]() Guerra de Libia en 2011. Foto: Wikimedia Commons |
Multitudinarias manifestaciones también precedieron el conflicto armado en Libia, donde Muammar Gaddafi fue derrocado en octubre de 2011, después de 42 años en el poder.
Ese mismo año la guerra civil estalló en Siria, y se transmitió en Youtube el espectáculo de títeres “Top Goon” que se burló y ridiculizó a Bashar al-Assad, al reducir el cuerpo de este poderoso gobernante al tamaño de un pequeño títere.
En otros países del norte de África y de la península Arábica estallaron protestas, manifestaciones y conflictos. Entonces los muros de Beirut fueron testigo de los mensajes políticos a través de grafitis y esténciles que fueron inmortalizados para la historia del arte en forma espontánea por cámaras digitales e Internet, como explica el autor en la parte IV de su libro.
En el libro se puede ver que los cuerpos son medios centrales de transmisión del mensaje y son metáforas en carne y hueso de las confrontaciones políticas de la Primavera Árabe, desde los cuerpos en llamas o desnudos con fines políticos hasta las brutales "pruebas de virginidad" contra las participantes de protestas; desde la sátira del aspecto físico de los líderes a la remoción por la fuerza de sus estatuas o de ellos mismos.
Kraidy dice que "con el tiempo, la noción del cuerpo político evolucionó para equilibrar la jerarquía con la interdependencia, llevando a pactos de estabilidad política y continuidad, pero estos pactos al quebrantarse fueron una invitación a la rebelión".
La bloguera desnuda de El Cairo es un libro útil para entender, más allá de los titulares, lo que sucedió en la Primavera Árabe. Además, este libro nos proporciona algunos "lentes conceptuales" muy útiles para abordar otras movilizaciones, como aquellas ocurridas en América Latina en 2016, sin olvidar las diferencias entre esta región y el mundo árabe en términos de cultura, religión y libertad de expresión.
Las experiencias americanas
![]() Samira Ibrahim, activista egipcia durante la revolución del mismo país. Foto: Wikimedia Commons |
En 2016 una mujer argentina fue amonestada por dos policías por amamantar a su bebé en el espacio público de Buenos Aires. La mujer procedió a denunciar este hecho en la oficina de Asuntos de la Mujer, donde no obtuvo respuesta. Entonces, acudió a su Facebook para hacer una denuncia pública que se volvió viral.
Pocos días después, el 23 de julio de 2016, ocurrió el #Piquetetazo y la #TeteadaMasiva, espacios físicos y virtuales donde miles de mujeres de Argentina y Latinoamérica amamantaron bebés frente a todos en un claro desafío al absurdo control policivo ejercido sobre las madres lactantes.
La bloguera desnuda de El Cairo es un libro útil para entender, más allá de los titulares, lo que sucedió en la Primavera Árabe.
Igualmente, la #SlutWalk, una movilización física y digital en la que miles de mujeres y hombres se vistieron como prostitutas, fue la respuesta en 2011 de los movimientos sociales canadienses a un policía en Toronto que dijo en una conferencia sobre seguridad civil “que las mujeres deberían evitar vestirse como putas si no querían ser víctimas de violencia sexual”. Su versión en español fue #LaMarchaDeLasPutas que ocurrió en Estados Unidos, México, Argentina, Costa Rica, Perú, Ecuador, Honduras, Uruguay y Colombia.
En Perú, ante varios ataques a mujeres se desató una gran movilización en Facebook y Twitter bajo el hashtag #NiUnaMenos, la cual pasó al espacio físico en una enorme marcha que ocurrió el 13 de agosto de 2016 en Lima. Todas estas acciones se fortalecieron mediante memes, grafitis, esténciles y videos cortos.
Es común en los países latinoamericanos que las decisiones políticas que afectan los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres sean tomadas por hombres, o por mayorías de hombres, y que la cultura patriarcal latinoamericana, violenta, machista y sexista, ocasione dolores horribles y temores permanentes en los cuerpos femeninos. Y estos temores se viven y se manifiestan permanentemente en la intimidad o en el espacio público.
Por eso los movimientos sociales opuestos a esta situación han organizado protestas físicas y digitales y han usado estrategias de “insurgencia creativa”. Hacer preguntas más allá de las redes sociales y los medios digitales involucrados, sin negar su efectividad como plataformas organizativas y propagadoras de mensajes, e intentar comprender los fenómenos sociales estructurales desde el cuerpo y lo político, el arte y el feminismo, es la lección e inspiración que deja el libro de Kraidy.
*Abogado y magíster en Políticas Públicas.
@HectorH2_O