Un lúcido retrato social y geográfico de los jefes políticos y los votantes que este domingo apoyaron al candidato ganador en la primera vuelta. ¿De dónde sale la fuerza del uribismo y cuál es la visión de país que comparten sus electores?
Una fuerza persistente
Los resultados electorales del 9 de marzo y el triunfo de Óscar Iván Zuluaga en la primera vuelta muestran cómo a pesar de los muchos escándalos que han rodeado al uribismo (chuzadas, carrusel de notarías, falsas desmovilizaciones, parapolítica….), esta fuerza política sigue siendo una opción de gobierno real y atractiva para muchos colombianos.
Por eso cabe preguntarse por el origen y las características de los sectores sociales y políticos que han sido fieles al uribismo durante más de doce años.
que existen cuatro sectores diferentes que apoyan incondicionalmente al ex presidente Álvaro Uribe (y por lo tanto a Óscar Iván Zuluaga).
Tomando en cuenta el origen social de los líderes políticos que apoyan públicamente al uribismo, y analizando geográficamente la votación por la lista del Centro Democrático al Senado y por Zuluaga en la primera vuelta, podría concluirse que existen cuatro sectores diferentes que apoyan incondicionalmente al ex presidente Álvaro Uribe (y por lo tanto a Óscar Iván Zuluaga).
Caciques
En primer lugar están los hijos de los caciques electorales de la década de los ochenta, que después de ser marginalizados por otras fuerzas políticas, vieron en el uribismo su mejor opción para reencaucharse.
Sus representantes son Carlos Holmes Trujillo (hijo del ex congresista valluno Holmes Trujillo, y heredero del “holmismo”); María del Rosario Guerra (hija de Joselito Guerra, ex senador sucreño) y Bernardo Guerra Hoyos (hijo del ex senador antioqueño Bernardo Guerra Serna, y heredero del “guerrismo”).
Los hijos de estos caciques defienden un discurso regionalista y de reivindicación de la provincia frente al centralismo bogotano. Por ejemplo, durante su campaña electoral en Quibdó (Chocó), Carlos Holmes Trujillo afirmó: "La situación de pobreza y el abandono es francamente una acusación que se hace desde la provincia al centralismo, y eso demuestra que tenemos que tener como prioridad la profundización y consolidación de la descentralización".
![]() El candidato a la presidencia, Oscar Iván Zuluaga. Foto: Politécnico Grancolombiano |
Aristócratas
En segundo lugar, el uribismo es apoyado por una aristocracia conservadora representada por Miguel Gómez Martínez (bogotano, sobrino del ex constituyente Álvaro Gómez Hurtado, y heredero del “laurenanismo”); Paloma Valencia (nieta del ex Presidente Guillermo León Valencia); Ana Mercedes Gómez (ex directora del periódico El Colombiano); Carlos Holguín Sardi (valluno, ex ministro del Interior) y Fernando Araújo Perdomo (ex canciller, y miembro de una familia de notables de Cartagena).
Esta aristocracia conservadora comparte con Álvaro Uribe, valores como el respeto por el orden y la autoridad, la religiosidad católica, la visión de la familia como núcleo central de la sociedad, y sobre todo, consideran a la Patria como un valor supremo.
Los escritos de Paloma Valencia reflejan ese patriotismo que comparten los aristócratas conservadores con el ex presidente Uribe: “La identidad de la nación colombiana se consolidó con Uribe, somos un país con problemas, pero digno… Señor Presidente, usted representa lo más excelso de esta patria y ha hecho de nosotros mejores colombianos, comprometidos cabalmente con esta Nación”
Dueños de tierras
En tercer lugar están los medianos propietarios de tierra en el Eje Cafetero, Tolima y Santander (dedicados al cultivo del café o a la extracción de minerales) y los terratenientes en los Llanos Orientales (dedicados a la ganadería extensiva), que están agradecidos con Uribe por los beneficios que les trajo la política de seguridad democrática (volver a sus propiedades, no tener que pagarle “vacuna” a los paramilitares, transitar de manera tranquila por las carreteras, etc.).
Muchos de los propietarios de tierras en el Eje Cafetero y los Llanos Orientales contribuyeron a la campaña del Centro Democrático al Senado y a la Presidencia con buses para transportar votantes y con publicidad (esto lo he comprobado en entrevistas con diferentes hacendados de las dos regiones). Tal vez por eso el porcentaje de participación en una y otra fue mayor que en el resto del país (el promedio nacional fue 40 por ciento mientras que en los Llanos Orientales y el Eje Cafetero fue 48 por ciento). De hecho, en los cinco departamentos donde la abstención electoral fue menor, Óscar Iván Zuluaga obtuvo la mayor votación, como indica el Cuadro 1.
Cuadro 1. Coincidencia entre departamentos con mayores tasas de participación electoral y votación por Óscar Iván Zuluaga.
Región |
Departamento |
Nivel de participación electoral |
Porcentaje de votos obtenidos por Óscar Iván Zuluaga |
Porcentaje de votos obtenidos por Juan Manuel Santos |
Llanos Orientales |
Casanare |
52,50% |
57,72 |
8,94 |
Sabana de Bogotá |
Cundinamarca |
49,16% |
31,59 |
17,86 |
Llanos Orientales |
Meta |
40,13% |
43,06 |
16,41 |
Sabana de Bogotá |
Bogotá |
48,31% |
22,09 |
18,08 |
Eje Cafetero |
Caldas |
47,87% |
40,45 |
18,03 |
Risaralda |
46,74% |
29,96 |
19,56 |
|
Quindío |
46,38% |
29,01 |
23,89 |
Fuente: Elaboración propia sobre la base de información reportada por la Registraduría Nacional del Estado Civil en su Boletín número 12
Clase media
Y en cuarto lugar está una porción significativa de la clase media urbana (ubicada en Bogotá y Medellín, principalmente) cuya preferencia electoral gira en torno al tema de la seguridad (prefieren alternativas de “mano dura” y de “cero concesiones” contra los delincuentes).
En efecto: el 50 por ciento de los votos que inclinaron la balanza a favor de Zuluaga y en contra de Santos provino de las grandes ciudades de Colombia. Según se ve en el Cuadro 2, de los 558.261 votos de ventaja, 276.165 fueron aportados por Bogotá, Medellín, Cartagena e Ibagué. En Bogotá y Medellín exclusivamente, la diferencia ascendió casi a 300 mil votos.
Cuadro 2. Votación por Óscar Iván Zuluaga y Juan Manuel Santos en las ciudades más grandes de Colombia
Departamento |
Número de votos obtenidos por Óscar Iván Zuluaga |
Número de votos obtenidos por Juan Manuel Santos |
Diferencia de votos |
Bogotá |
542,432 |
444,051 |
98,381 |
Medellín |
269,646 |
69,638 |
200,008 |
Cali |
98,367 |
128,886 |
-30,519 |
Barranquilla |
47,154 |
81,892 |
-34,738 |
Cartagena |
45,581 |
37,776 |
7,805 |
Ibagué |
64,321 |
29,093 |
35,228 |
Total |
276,165 |
Geografía del uribismo
Por los motivos anteriores, en las dos últimas elecciones (Congreso y Presidencia), el uribismo logró la máxima votación en el Eje Cafetero, los Llanos Orientales, Tolima, Antioquia, y Bogotá, pues allí reside su base social y política.
El uribismo, entonces, tiene raíces sociales y políticas que están bien delimitadas geográficamente, y que obedecen a las condiciones materiales e históricas de vida de la población que vive en dichas regiones.
El uribismo, entonces, tiene raíces sociales y políticas que están bien delimitadas geográficamente, y que obedecen a las condiciones materiales e históricas de vida de la población que vive en dichas regiones.
En las otras regiones del país –Costa atlántica y Caribe, Nariño y Cauca-, los electores se inclinan a favor del santismo, pues no están dadas las condiciones materiales y sociales para que surjan apoyos incondicionales hacia el ex presidente Álvaro Uribe y por ende, a su candidato Óscar Iván Zuluaga.
Proyecto de país
En conclusión, el uribismo es una coalición pluriclasista, que reside en los centros urbanos y en áreas rurales. Esta coalición incluye a políticos conservadores de “cuna” y a los herederos de los caciques electorales de los años ochenta.
Dicha coalición pluriclasista parece estar pegada ideológicamente, pues comparten las siguientes creencias y valores: una visión conservadora sobre el poder y la autoridad, un imaginario nacionalista y patriótico, un repudio por los criminales que atentan contra la integridad de la propiedad privada y un sentimiento de indignación hacia el centralismo burocrático bogotano.
* Politólogo de la Universidad Javeriana y candidato a magíster en Estudios Políticos de la Universidad Nacional. Autor del libro “’Democracias en venta. Partidos, corrupción electoral, violencia y crimen en Colombia (2007-2011)”, y de varios artículos en Papel Político, Estudios Sociojurídicos y otras revistas