Un partidario confeso del candidato que puntea las encuestas le plantea interrogantes profundos a raíz de sus afirmaciones sobre el PDA y sobre las ideas de Gustavo Petro.
Freddy Cante*
En un país de ciegos…
En el país donde pululan los promotores del atajo y del silencio, los líderes más honestos y transparentes son reyes, o al menos presidentes. La indiscutible ventaja de la fórmula verde es que Mockus y sus seguidores no toleran el juego sucio ni la trampa, y no habrán de recurrir a medios ilícitos (ilegales e inmorales) para alcanzar fines como la seguridad, la justicia y la paz.
Los campeones políticos del atajismo se han caracterizado por su visión simplista y reduccionista. El saliente presidente Uribe quiso convencernos de que el único mal de la democracia colombiana son los narcoterroristas de "las far…". El candidato triunfalista Santos nos quiere hacer ver que la política de seguridad democrática ha funcionado plenamente. Este ungido uribista, brillante autor de la operación Jaque (estratagema que mejor sería denominar como operación mandrágora[1]) de llegar al solio presidencial va a requerir de más de un salto mortal para lograr su anunciada "prosperidad democrática".
Pero sucede que también Antanas Mockus, gracias a ciertas intervenciones apresuradas o a racionamientos equivocados, está al borde de tomar otros atajos. Aprovecho que el Partido Verde reclama en estos días el concurso de la ciudadanía para mejorar su programa de gobierno; respondo aquí a ese llamado y asumo mi deber de ejercitar la crítica; y lo hago con un genuino sentimiento de respeto por "el profesor" de quien aprendí lecciones tan significativas en materia de política y moralidad.
Las palabras de Mockus
Sobre su lema de campaña ha dicho el candidato de los Verdes que: "Podemos ser mucho mejor de lo que hasta ahora hemos sido. Por ahora hay tres lemas: "´Colombia Legal´… ´Construir sobre lo construido´… y ´Con educación todo se puede´"[2].
Por otra parte esta misma semana, al descartar una alianza electoral con el Polo Democrático Alternativo, el candidato del Partido Verde hizo dos afirmaciones polémicas: (1) "Para mucha gente el Polo sigue significando una posición blanda frente a la guerrilla. Eso es en parte injusto con miembros del Polo, pero allí aún hay fuerzas que no han roto lazos de justificación de la pelea armada"; (2) "He escuchado unas tres o cuatro veces al propio Gustavo Petro en los foros diciendo que si no hay 'tal y tal' mejoras o reforma agraria habrá violencia. No es que Petro esté invitando a que haya más violencia, pero sigue teniendo teorías que, de algún modo, directo o indirecto, justifican la violencia. Me cuesta trabajo aliarme con alguien que va tan en contra de mis pensamientos"[3].
Legalidad sin oportunidad es un atajo
"Con la misma vara que mides te medirán…" no es sólo el estribillo de una vieja y excelente canción de salsa neoyorquina, sino una sabia sentencia de la Biblia. Mockus ha puesto un reto colosal a la ciudadanía, hacedores de políticas y servidores públicos: no es lícito recurrir al camino más corto y facilista de los atajos, no se pueden alterar u omitir los medios para llegar a los fines, por más loables y urgentes que ellos sean.
Unas sencillas preguntas ayudan a entender cómo es que las más loables motivaciones resultan en acciones frustradas de no existir al menos algunas oportunidades para actuar. ¿Un joven podrá desplegar su talento deportivo si, a pesar de sus deseos y entrenamientos, no tiene acceso a suficientes nutrientes y a espacios adecuados para el deporte?; ¿Unos campesinos bienintencionados y cumplidores de los deberes podrán cultivar vegetales lícitos sin al menos algún apoyo en materia de infraestructura, acceso a créditos y a redes mercantiles?; ¿Unas comunidades asediadas por la pobreza y por actores armados ilegales y aún legales, podrán seguir resistiendo sin suficientes oportunidades políticas y sin apoyo a su economía?
Para no incurrir en alguna suerte de atajo argumentativo, es apenas justo mencionar que en el programa de gobierno del Partido Verde existe una permanente alusión a la generación de oportunidades, que de algún modo nos indican coherencia en su propuesta política. Se destacan pautas como la tributación progresiva, la lucha contra la impunidad, la erradicación del hambre y el fomento de la educación[4]. Pero sin duda el motor de la transformación social que propone Antanas Mockus radica en las motivaciones, y por eso su programa subraya la importancia de la educación, la cultura ciudadana y la generación de comportamientos legales, de manera que justicia social y equidad son un resultado, básicamente, de buena motivación.
No sólo de motivaciones vive el ser humano
La acción humana depende de motivaciones (creencias, preferencias y normas sociales) y de oportunidades concretas (ingreso, riqueza, información e instituciones). Mientras que las motivaciones tienen que ver con la subjetividad, las oportunidades están relacionadas con el ambiente y la estructura social.
Algunos autores como Holmes y Sunstein[5] o yo mismo[6] hemos mostrado que la satisfacción de los derechos es costosa y requiere de suficientes oportunidades tangibles. Algunos otros como Jon Elster[7] han mostrado que reducciones involuntarias en el conjunto de oportunidades pueden dar origen a preferencias adaptativas y a falta de autonomía; y que cambios deliberados en las oportunidades ayudan a superar problemas de racionalidad limitada o debilidad de la voluntad y a evitar ciertas reacciones emocionales. Proponentes del "paternalismo libertario" como Thaler y Sunstein[8], muestran que la libertad de elegir se amplía si las personas pueden tener acceso a más y mejores oportunidades de información, para conocer los aspectos buenos y los nocivos de cualquier bien o servicio existente.
Las contribuciones seminales de Rawls [9] y de Sen[10] radican en haber introducido la libertad de elegir dentro de los bienes primarios (opciones básicas de cada persona), y en haber mostrado cómo es que la capacidad de acción y desarrollo personal depende de suficientes oportunidades. La justicia social se basa en los pilares de la estructura de incentivos que tanto preocupó a Rawls, y en la educación y el fomento de comportamientos justos que se han convertido en la obsesión reciente de Sen.
En un mundo sin tentaciones la "virtud" de ser un ángel pudoroso sería risible o dudosa. Pero en medio de un infierno dantesco, donde las personas sólo tienen acceso al pecado, al crimen y a diversos atajos, el hecho de ser virtuoso vendría a ser una auténtica proeza. Los deberes y las virtudes quizás por siempre serán menos rentables y tentadores que los atajos y la corrupción, pero al menos hay que ofrecer un mínimo de oportunidades dignas y decentes a la gente virtuosa y no atajista.
La vida social es un proceso de interacción. Si unas personas le juegan a la virtud y al cumplimiento de deberes mientras otras le apuestan a la corrupción y a diversos atajos, entonces los corruptos se recostarán sobre las buenas obras de los cumplidores. Si unos grupos sociales resultan marginados y arrinconados, privados de medios mínimos de subsistencia y agredidos, optarán por la violencia y la retaliación a menos que estén compuestos de ángeles u otras especies sobrenaturales.
La existencia de suficientes oportunidades materiales obedece al imperativo moral de que no basta el sólo hecho de vivir: hay que vivir dignamente.
En términos generales yo sugeriría que al lado del fomento de la educación y la promoción de comportamientos virtuosos y legales que reclama Antanas Mockus, existiera una más decidida y explícita política social que se traduzca en un concepto amplio de seguridad (seguridad alimentaria, seguridad social, seguridad ambiental). Sobre el movimiento de tan potentes motores se podría avanzar en la dirección de una vida digna y de una sociedad más justa.
Oportunidades para la acción colectiva y virtudes de la destrucción
La conjunción de adecuados comportamientos (motivaciones virtuosas y legales) y de suficientes oportunidades factibles, podría aplicarse para transformar distintas entidades, de tal manera que dejen de ser fuentes de corrupción y clientelismo, y se conviertan en motores que potencien las acciones colectivas. Entidades como Familias en Acción y Acción Social podrían transformarse radicalmente, de tal modo que sirvan para el fomento de procesos colectivos a gran escala. Es necesario y oportuno brindar apoyo a procesos de cooperación comunitaria, comunidades en resistencia civil, y procesos de desarrollo local.
Por lo demás no siempre es posible "construir sobre lo construido". Existen estructuras deformes y peligrosas, como el legado Uribista de los incentivos incorrectos que forman la columna vertebral de su política de seguridad democrática. La colectividad que lidera el "profe" Antanas incluye a personalidades y sectores sociales que han denunciado y condenado prácticas como los falsos positivos y la parapolítica. Un gobierno liderado por Mockus tendría el reto enorme de destruir y erradicar los aspectos más negativos y peligrosos de la política de seguridad democrática.
*Doctor en Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia. Ha sido asesor de Antanas Mockus en el programa de resistencia civil, durante su segunda alcaldía. Posteriormente fue asesor de la Secretaría de Gobierno Distrital, durante parte de la administración de Lucho Garzón. Recientemente ha sido consultor del International Center on Non Violent Conflict. Actualmente es profesor principal de la Facultad de Ciencia Política de la Universidad del Rosario, e investigador en temas de acción colectiva y movimientos sociales. Es editor académico y coautor de más de 7 libros sobre acción política no violenta y acción colectiva. Este año saldrá su primer libro sobre libertades individuales y acción colectiva. Correo: documentosong@gmail.com
Notas de pie de página
[1] La Mandrágora es una comedia escrita por Maquiavelo; el protagonista de tal historieta ostentaba un gran poder económico (o de soborno) y así pudo comprar apoyos y lealtades para llegar al fin que anhelaba.
[2] Mockus desarrolló estas tres tesis en un foro convocado por el Observatorio de Opinión Pública (OPIP) de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno de la Universidad del Rosario y la revista Semana; ver http://www.urosario.edu.co/Elecciones/Credenciales-(1)/Antanas-Mockus/
[3] Declaraciones desde Manizales para Radio Caracol, 10 de mayo de 2010, reproducidas por ejemplo en http://www.eltiempo.com/elecciones2010/antanasmockus/ARTICULO-WEB-PLANTILLA_NOTA_INTERIOR-7703030.html
[4] ver http://www.partidoverde.org.co/PropuestadeGobierno.aspx
[5] S. Holmes y C Sunstein, C. 1999, The Cost of Rights: Why Liberty depends on Taxes, W.W. Norton and Company, New York.
[6] F.Cante 2006, Libertades individuales y oportunidades factibles. Tesis doctoral. Bogotá: Universidad Nacional de Colombia.
[7] J. Elster 1999, Alchemies of the Mind, Cambridge University Press.
[8] R. Thaler y C. Sunstein 2008. Nudge: Improving Decisions About Health, Wealth, and Happiness. New York, Penguin Books.
[9] J. Rawls 1999 [1970], A Theory of Justice, Belkhap Press of Harvard University Press, Cambridge (Mass.)
[10] A. Sen 2009. The Idea of Justice. Harvard University Press.