Más de la mitad de los contratos públicos liquidados son de las alcaldías. La mayoría presenta más gastos de los presupuestados
Luis Carlos Calixto Rodríguez*
Muchas alcaldías y contratos
Hace una semana se analizó el tema de los contratos realizados por las gobernaciones, de acuerdo con los datos registrados en el Sistema Electrónico para la Contratación Pública (SECOP). En esta columna es el turno de las alcaldías y sus contratos.
De manera específica, se revisará la coherencia y completitud de la información, medidas de ahorro y gasto en la contratación y concentración presupuestal según el Coeficiente de Gini.
Las alcaldías juegan un papel importante en la contratación pública por dos razones: existe un alto número de alcaldías en el país y representan un gran volumen de los contratos en la plataforma del SECOP I.
En Colombia hay 1124 municipios, según cifras oficiales del Portal de Datos Abiertos, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones. Solo los departamentos de Antioquia, Boyacá y Cundinamarca cuentan con el 32,41 % del total de los municipios del país.
Por tal razón, describir el comportamiento que tienen estas 1124 alcaldías es importante en la comprensión de la contratación pública y, específicamente, en el gasto público territorial.
De un total de 2,23 millones de contratos liquidados por todas las entidades territoriales, las alcaldías cuentan con 1,13 millones de estos, como lo muestra la gráfica 1. Es decir que la participación de las alcaldías en la contratación pública es de un 54,1 %.
Al igual que las gobernaciones, las alcaldías presentan una tendencia decreciente en el comportamiento de los contratos liquidados. En 2010, la participación de las alcaldías sobre el total de contratos liquidados fue de 64,8 % y para el 2020 fue del 48,6 %.
Este fenómeno se puede explicar con la migración de los reportes de información que están haciendo las gobernaciones y alcaldías de la plataforma del SECOP I a la del SECOP II.
Se debe resaltar que en este análisis no se usa la información del SECOP II porque no permite estimar el ahorro o gasto en temas de contratación pública, ya que no cuenta con el mismo número de variables con las que cuenta el SECOP I.

Completitud y coherencia de la información
Para el estudio de la completitud y la coherencia de la información sobre los contratos de las alcaldías, se cuenta con las variables de Valor del Proceso y Valor del Contrato con un promedio del 0,15 % y el 0,16 %, respectivamente. Los contratos liquidados indican tener un valor de 0, que en términos de participación es bajo y no afectaría el análisis.
El problema viene cuando se analiza el comportamiento de la variable Valor Total con Adiciones. En esta, el porcentaje crece de manera muy significativa y perjudica los análisis, pues alcanza un promedio del 89,68 %. Implica que casi 9 de 10 contratos liquidados no se pueden analizar por problemas en la coherencia y completitud de la información.
En aproximadamente 99 contratos de 100 se gastó más de lo que en un principio se proyectó. En las gobernaciones estos mismos indicadores son iguales a 97,19 % y 97,28 %, respectivamente.
Este indicador es preocupante tanto para gobernaciones como para alcaldías. Para las gobernaciones se cuenta con un promedio de 86,2 %. Para las alcaldías, como se mencionó anteriormente, es de 89,68 %, que significa un 3,5 % de diferencia más para las alcaldías.
Motivo por el cual, se debe depurar la información. Así, se pasa de tener 1,13 millones a 119 942 contratos liquidados.
Más gastos de los presupuestados
Con estos contratos se observa que cuando se compara el Valor Total del Contrato con Adiciones con el Valor del Contrato (indicador 3 de ahorro y gasto), el 98,77 % de los contratos gastó más de lo que se presupuestó. Aumenta la participación al 98,84 % cuando se compara el Valor Total con Adiciones con el Valor del Proceso.
Esto quiere decir que en aproximadamente 99 contratos de 100 se gastó más de lo que en un principio se proyectó. En las gobernaciones estos mismos indicadores son iguales a 97,19 % y 97,28 %, respectivamente.
La gráfica 2 describe el comportamiento histórico del uso del presupuesto. Es evidente que en la mayoría de los contratos se gasta más de lo que se presupuesta.

Además, es importante precisar que en la mayoría de los contratos se gasta 2,82 veces más de lo que se presupuesta en el periodo de estudio. De manera específica en 2010 fue de 3,25 y en 2020 fue de 2,86.
Alta concentración
Finalmente, con el indicador del Coeficiente de Gini se observa la concentración presupuestal. Las alcaldías presentan un Gini en la contratación igual a 0,832, mientras que el Gini de las gobernaciones es igual a 0,839.
Como lo muestra la gráfica 3, en algunos periodos el Gini de las alcaldías es más alto que el Gini de las gobernaciones, pero, de manera general, en ambos entes territoriales se presentan Gini altos. Esto indica una alta concentración en la contratación pública de estos dos tipos de entes territoriales.

*Este artículo hace parte de la alianza entre Razón Pública y la Facultad de Economía de la Universidad Externado de Colombia. Las opiniones expresadas son responsabilidad de los autores.