La elección presidencial en Argentina irá a una segunda vuelta. Los ciudadanos, desanimados y escépticos, esperan que la persona escogida sea capaz de aliviar la severa crisis económica.
Nicolás Liendo*
Massa vs Milei
El domingo 22 de octubre tuvieron lugar las elecciones generales en Argentina. Además de la primera vuelta presidencial, se renovó la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.
También cuatro provincias eligieron autoridades provinciales, dos de especial importancia por el peso en el padrón electoral nacional de 44,2 %, la ciudad Autónoma de Buenos Aires y la Provincia de Buenos Aires.
Sergio Massa sorprendió y con un 36,6 % se impuso sobre Javier Milei que terminó con 29,9 %, seguido por Patricia Bullrich con 23,8 %. Completaron Juan Schiaretti con 6,7 % y la candidata de izquierda Myriam Bregman con 2,7 %.
Pero como no alcanzó el umbral dispuesto en la legislación argentina (45% o un 40% y una diferencia de 10% respecto al segundo), habrá segunda vuelta el próximo 19 de noviembre. Allí los ciudadanos deberán elegir entre continuidad, es decir, Massa, o un cambio radical con Milei.
La sorprendente victoria de Massa
Sergio Massa es el actual ministro de Economía del kirchnerismo y lleva un año en el cargo.
Argentina está viviendo una grave crisis económica: 140 % de inflación anual, 40 % de pobreza, devaluación constante de la moneda, de los salarios mínimos más bajos de Sudamérica y una deuda externa que parece impagable. El 2023 será otro año de recesión, con un crecimiento negativo de -2.8 % del PIB.
Al mal desempeño económico se suman controles de precios asfixiantes e ineficientes de los productos importados que hacen escasear la gasolina, neumáticos y medicamentos vitales, así como insumos que necesita la industria.
El modelo económico parece haberse agotado. Pensiones que en su mayoría no superan la línea de la pobreza y una gran de la población que sobrevive a punta de empleos informales o subsidios del Estado (nacional o provincial).
El kirchnerismo ha gobernado Argentina durante 16 de los últimos 20 años, y además ha estado en control de la mayoría de las provincias durante 40 años.
Y por su parte Massa pasó de ser jefe de gabinete de Cristina Fernández en su primer período (2008-2009), a ser crítico acérrimo y candidato a la presidencia en 2015 donde obtuvo 21 % de los votos. Ahora busca liderar el peronismo.
En las encuestas Massa venía de segundo, pero superó los pronósticos.
Massa es un político tradicional, que representa una nueva generación de líderes. Tiene 51 años, es más pragmático y moderado que los de su generación anterior, ha hecho una campaña efectiva y logró distraer la atención de la crisis económica hacia propuestas en temas como los derechos humanos y de minorías, la protección laboral, el medioambiente y la educación.

¿De dónde salió Milei?
Javier Milei es un outsider economista libertario, que durante los últimos años desfiló por programas de televisión nacional criticando las políticas proteccionistas y estatistas del peronismo.
Argentina está viviendo una grave crisis económica: 140 % de inflación anual, 40 % de pobreza, devaluación constante de la moneda, de los salarios mínimos más bajos de Sudamérica y una deuda externa que parece impagable.
En 2021 se postuló a la Cámara de diputados y llegó al congreso con un sorprendente 13,4 % de los votos, quedando como tercera fuerza política en la Ciudad de Buenos Aires.
Su propuesta encaja en un fenómeno global de surgimiento de la nueva derecha radical. Esta derecha se caracteriza por una agenda antisistema —que Milei denomina anti-casta—, con serias críticas a las instituciones y élites existentes.
Además, con una promesa de transformación encarnada en lo que Milei denomina ‘una batalla cultural’ que promueve al individuo, la libertad personal irrestricta y la economía de mercado.
Milei propone la dolarización y el ‘plan motosierra’ que consiste en reducir el tamaño del Estado, el asistencialismo, privatizar empresas públicas y servicios como la educación o la salud, así como la flexibilización laboral.
Ante la percepción de una experiencia de alternancia negativa producto de los resultados de la gestión Macri cuando derrotó al kirchnerismo en 2015, Milei irrumpió como una opción extrema que propone hacer “un punto y aparte” y “el ajuste que otros no se animan”.
El sistema político argentino ha estado marcado por la grieta peronismo-anti-peronismo. Reeditado en las dos últimas décadas en kirchnerismo-antikirchnerismo, pero la llegada de Milei podría fragmentar aún más al heterogéneo bloque antiperonista.
Las claves para la segunda vuelta
- Voto bronca vs. voto miedo. En las primarias, Milei supo canalizar el enojo de los argentinos contra el gobierno por la crisis económica, la corrupción y la decreciente calidad de los servicios públicos. Por el estilo de comunicación directa, especialmente, Milei atrajo más a votantes jóvenes, hombres, y del interior del país.
Massa, por su parte, pudo presentar a Milei como un salto al vacío y un riesgo para la democracia — en una verdadera campaña focalizada en el miedo—.
Ahora cada candidato buscará que su encuadre centralice el debate en la segunda vuelta.
- La participación electoral en Argentina ha sido alta comparado con el promedio de América Latina. Pero como muestra la siguiente gráfica del Ministerio del Interior, mientras que entre 1983 y 1999 la participación fue de 82,68 % promedio, a partir de la crisis social del 2001 y hasta el 2021, se ha producido una caída de la participación al 76,95 %, es decir, una disminución de 5,73 %.

En este proceso electoral la participación en las primarias fue 69,6 % y en la primera vuelta subió ocho puntos, al 77,6 %. Una de las claves será ver cuántos electores acuden a la segunda vuelta. En general, por ser una elección entre ‘el menos malo’ y con altos niveles de polarización, la participación tiende a disminuir; la pregunta será quienes y en qué regiones se abstienen más o se abstienen menos de votar.
- Estrategia y coordinación de los actores. Pasada la primera vuelta, la disputa estará concentrada en atraer a los dirigentes y votantes de los espacios políticos que terminaron en tercer, cuarto y quinto lugar.
Las primeras encuestas indican que Massa arranca con ventaja, pero como hay muchos indecisos todavía se está repensando las estrategias de lado y lado.
Un 53 % de los electores escogieron propuestas de derecha. Milei moderará algunas propuestas, y ya ha logrado la adhesión de Bullrich y del expresidente Macri. Pero otro sector perdedor de la interna de Juntos por el Cambio y del partido Radical se han declarado neutrales, aunque algunos líderes apoyarían indirectamente a Massa.
El oficialismo tiene el desafío del manejo de la economía, que cada día está en peor estado. Su estrategia apunta a mantener movilizado al peronismo, así como atraer los votantes de la izquierda y del peronista disidente Juan Schiaretti.
Horizonte complejo e incierto
Las primeras encuestas indican que Massa arranca con ventaja, pero como hay muchos indecisos todavía se está repensando las estrategias de lado y lado. Falta también el último debate por televisión del domingo 12 de noviembre, todo lo que aumenta la incertidumbre.
En América Latina las segundas vueltas están siendo cada vez más competitivas. En siete de las últimas diez elecciones regionales donde hubo segunda vuelta, el que había salido segundo en primera vuelta, revirtió el resultado. ¿Podrá Milei revertir la ventaja inicial de Massa?
Gané quien gané las elecciones, desde el 10 de diciembre, el próximo presidente tendrá la difícil misión de detener la ‘bomba económica’, ejecutar un plan de emergencia que permita el crecimiento económico y cambiar el ánimo de un país extremadamente polarizado y escéptico.
6 Comentarios
La votación es un derecho fundamental que se debe llevar acabo en todos los países. Argentina en estos momentos, como dice la noticia, se ve envuelto en una crisis económica que es un factor determinante para quien gane estas elecciones. Creo que es importante resaltar de la noticia que se dará una segunda vuelta y que esta será competida, pues de esto se trata la democracia.
Es de vital importancia estás elecciones para argentina que a estado sufriendo, la decisión que los argentinos tengan con el fin de mejorar sus problemas con los que a estado soportando por eso es de vital importansia que más argentinos voten para que esté cambio que se puede producir sea decidido por la mayoría de la población.
El artículo tiende a presentar una visión parcial de los candidatos y sus propuestas. Se enfoca en describir las propuestas económicas de Milei y los problemas económicos del país, pero siento que no profundiza de manera equitativa en la plataforma de Sergio Massa. Este artículo menciona estadísticas económicas, como la inflación y la pobreza, pero no proporciona información sobre la situación económica actual más allá de la fecha de la elección de octubre de 2022. Sería beneficioso incluir datos más actualizados para ofrecer una imagen precisa de la crisis económica en Argentina.
La situación política en Argentina refleja una dinámica dificil que nace de las tensiones y desafíos económicos y sociales que enfrenta el país. Las figuras políticas extremas en este contexto resalta cómo la crisis económica y el descontento generalizado pueden dar lugar a soluciones políticas radicales. La segunda vuelta es de suma importancia y sobre todo de la participación ciudadana y el papel crucial que desempeñan los candidatos en la construcción de la confianza de un electorado diverso y fragmentado. Abordar los desafíos económicos y superar la polarización en la sociedad son tareas esenciales para el próximo presidente de Argentina.
Es preocupante y muy triste, observar el declive institucional, cultural, político, económico, educativo etc. de un país, de un país lleno de sentimiento, de alegría y de pasión, en que se debe fallar para que le pase todo esto a un país. Este artículo es un buen acercamiento superficial de lo que está pasando en Argentina. Una situación que refleja todo lo que puede estar mal hoy en día, soy creyente de que la educación debe ser primordial o debe ser la solución para que no se repitan estas historias. Aquí se evidencia en su máxima expresión, la crisis que está viviendo este sector social, la sociedad argentina lleva 20 años o 18 en lo mismo, ¿por qué no ha cambiado? ¿por qué sigue igual? la respuesta es simple, este es un país que no se ha educado por mucho tiempo, es un país «moderno» según Estanislao, propio del sistema.
Lo que más importa en un momento tan polarizado por el miedo como el enojo como bien dice el artículo, es que Argentina participe democráticamente no solo ahora, sino durante el próximo gobierno de manera que ningún cambio perjudique más a las masas empobrecidas, trabajadoras e inmigrantes. Los candidatos Milei y Massa son la representación de la desesperación, y aunque no hay mayor oportunidad con ninguno de los dos esperamos que haya una acción focalizada por el país y su mejora y no por el bien privado, un cambio que escuche las quejas y que las proyecte en su plan de acción, un cambio humano que no busque erradicar ni limitar, sino que trabaje para que conjuntamente salgan todos de la crisis que enfrenta el país.