La escritura científica no es una tarea para genios o investigadores con una larga trayectoria. Basta con entender el proceso y seguir estas recomendaciones.
Carlos Vélez Gutiérrez*
¿Cuál es la situación actual en Colombia?
En un artículo anterior para Razón Pública describí el panorama de la escritura académica en el país. A grandes rasgos, las producciones de la mayoría de las instituciones no provienen de un proceso estratégico de publicación, exceptuando las universidades de investigación (Nacional, Los Andes y de Antioquia, las más relevantes), que tienen grupos escalafonados en las categorías A1 y A.
Según el balance de Colciencias (2017), existen:
- 5.207 grupos, de los cuales 523 son categoría A1, 762 A, 1.168 B, 2.113 C y 641 no están clasificados.
- Los conforman 13.001 investigadores, de los cuales 124 son eméritos, 1.707 sénior, 3.595 asociados y 7.575 junior (esta clasificación obedece a la trayectoria de formación, calidad de las publicaciones y número de direcciones de tesis de maestría y doctorado).
- Estos grupos publicaron 17.641 artículos, distribuídos en 5 categorías (A1, A2, B, C y D).
En promedio, cada investigador publicó 1,3 artículos en ese año, mientras los grupos a los que pertenecen publicaron 3, artículos. Estas cifras siguen siendo muy bajas frente a las expectativas de Colciencias, que espera, en promedio, entre 3 y 5 artículos individualmente y entre 7,5 y 10 artículos colectivamente, dado el bajo número de investigadores por grupo (2,5 en promedio).
Esto significa que los esfuerzos de la última década siguen siendo insuficientes: la producción científica de Colombia sólo representa el 8, por ciento del total de Suramérica y ocupa el puesto 50 a nivel mundial. Por su parte, Brasil, el lider regional, produce el 58,5 por ciento de la ciencia suramericana y está en el puesto 15 a nivel mundial.
En contraste, los grupos A1 son los únicos que satisfacen las expectativas de Colciencias, así sus estándares sean inferiores a los internacionales: los 523 grupos de esta categoría produjeron 5.285 artículos que representan el 30 por ciento del total, con un promedio de 10 artículos por grupo; además, el 51,6 por ciento de sus artículos están en las mejores revistas de las categorías A1 (1.718) y A2 (947).
La producción científica de Colombia sólo representa el 8, por ciento del total de Suramérica.
La explicación está en la inversión y la voluntad política: mientras Brasil invierte el 1,27 por ciento del PIB, Colombia sólo invierte el 0,29. Por supuesto, éste no es más que un dato general sobre un fenómeno más complejo: la trayectoria científica de Brasil durante los últimos 50 años es mucho mayor que la colombiana.
Como consecuencia, Brasil hoy cuenta con una cultura de ciencia, tecnología e innovación consolidada, en expansión y con capacidad instalada para competir a nivel global. Por el contrario, este posicionamiento social y político de la ciencia en Colombia es aún muy incipiente, sobre todo porque los esfuerzos han sido discontinuos.
Sin perder de vista este contexto, la estrategia que proponemos aborda tres dimensiones de análisis y producción: macro, meso y microtextual. A continuación, presentamos las principales sugerencias para realizar este proceso de escritura.
Puede leer: La escritura científica: otra tarea pendiente.
Dimensión macrotextual
Esta dimensión consiste en tener claro el tipo de texto que vamos a escribir y cuál debe ser su estructura. Si no sabemos qué es un artículo científico y cómo organizar su contenido no podremos producirlo.
En primer lugar, artículo científico no es una denominación unívoca; en realidad, significa muchas cosas: a veces son documentos muy cortos de 5 páginas y a veces superan las 20. Las tres categorías más usuales (Plublindex indentifica 12) son:
- Artículos de revisión sobre los antecedentes teóricos o metodológicos;
- Artículos para divulgar todos los resultados; y
- Artículos cortos para comunicar resultados parciales.
Los que publican resultados generalmente tienen 4 partes: introducción, materiales y métodos (o metodología), resultados y discusión, aunque esta estructura varía según las características de la revista y los contextos de publicación. En todo caso, cada revista define qué tipos de artículos publica y cuáles son sus características.
Con base en lo anterior, lo primero que proponemos es identificar la revista, utilizando la base de datos de Publindex. En esta primera fase, explorar dos o tres revistas de la misma categoría y seleccionar la revista de acuerdo con los tipos de artículos que publica y los temas de nuestro interés.
![]() Foto: USDA |
Se trata de pensar el artículo en función de la revisión de los evaluadores y no sólo de lo que deseamos divulgar. Es muy usual este tipo de error: escribir el artículo para después elegir la revista. Nuestra propuesta parte de la selección de la revista, utilizando como criterio la viabilidad de su publicación.
Una vez seleccionada la revista, explorar los tres o cuatro números más recientes hasta encontrar algunos artículos que correspondan, más o menos, con lo que queremos publicar. Luego, revisar cuáles son sus partes y las principales características de sus contenidos; por ejemplo, extensión, número y tipos de citas utilizados, nivel de desarrollo temático, número, tipo y actualidad de las referencias y uso de tablas, gráficas y figuras, como los más relevantes.
Además, es recomendable verificar el cumplimiento de las normas para los autores, aunque frecuentemente hay cierta flexibilidad en aspectos como número de páginas, número y tipos de referencias aceptadas y otros.
Dimensión mesotextual
Para esta dimensión hay que tener en cuenta la progresión temática y el uso de conectores. La primera se refiere a las formas como distribuimos la información a lo largo del texto (en títulos, subtítulos y párrafos) y el segundo a las formas como relacionamos esa información (acentuar, contrastar, aclarar, adicionar, girar, ejemplificar, concluir, explicar, objetar, profundizar, entre otras).
Para analizar esta dimensión en los artículos seleccionados es muy importante distinguir entre lo que dicen los artículos y lo que hacen con estos contenidos; es decir, una cosa es el lenguaje que utilizan y otra las actividades cognitivas que expresan con ese lenguaje (por ejemplo, describir, interpretar, contrastar, valorar o proponer).
En términos de progresión temática, una oración está compuesta por dos partes: un tema y un comentario; por lo tanto, cuando producimos un párrafo, de lo que se trata es de establecer relaciones entre temas y comentarios.
Esto igualmente significa que, si un párrafo es el desarrollo de una idea mediante un conjunto de oraciones que se relacionan entre sí, la composición de un párrafo se logra mediante las relaciones intencionales entre temas y comentarios.
Para orientar el análisis de los artículos y la producción mesotextual, recomendamos tener en mente cuatro modos básicos de progresión: tema constante, tema evolutivo, temas derivados y salto temático. A continuación, ilustramos cada uno de estos modos dentro de los párrafos:
Tema constante: Los artículos científicos son textos para divulgar los hallazgos parciales o totales de un proceso de investigación; son la fuente principal para conocer el estado actual de cualquier campo científico y fenómeno sobre el cual se indague; adicionalmente, se convirtieron en el principal indicador del prestigio de los investigadores y, en gran medida, de su remuneración.
Hay un solo tema (los artículos científicos) y varios comentarios sobre ellos.
Tema evolutivo: Los artículos científicos se utilizan para divulgar los hallazgos de un proceso de investigación. Estos hallazgos se derivan del análisis sistemático de la información recolectada. Sin esta información, es imposible resolver los distintos tipos problemas que diferencian las ciencias naturales de las ciencias sociales.
Cada nuevo tema de la oración siguiente surge del comentario de la oración anterior.
Temas derivados Los artículos científicos cumplen 4 funciones básicas: los investigadores se visibilizan en las comunidades académicas y mejoran su estatus profesional; las instituciones se ubican mejor en los escalafones y ganan prestigio y reconocimiento; los países definen nuevas políticas de desarrollo social y económico y, por último, la sociedad adquiere conocimiento para resolver distintas problemáticas, sociales, económicas, ambientales y culturales.
Los temas 2, 3, 4 y 5 se derivan del primer comentario
Salto temático: Los artículos científicos se convirtieron en la clase de documento más importante para mostrar los avances científicos en las ciencias naturales y sociales. En Colombia, actualmente, el científico más importante es Rodolfo Llinás. Su relevancia global está directamente asociada con el número y la calidad de los aportes neurocientíficos que publicó.
Las dos primeras oraciones se construyen sobre temas diferentes, que son integrados en la tercera oración.
Dimensión microtextual
Esta dimensión tiene dos componentes: la formación de oraciones y el manejo de la puntuación. En los artículos seleccionados encontraremos oraciones simples y complejas, dependiendo del número de incisos (aclaraciones) que utilicen y su relación con los signos de puntuación.
Nuestra recomendación es preferir oraciones cortas o medianamente extensas a oraciones muy largas. En lo posible, evitar oraciones mayores de tres renglones. Hoy sabemos que una oración compuesta por entre quince y veinte palabras tiende a ser más clara que una oración muy extensa, por dos razones simples: entre más información contenga y entre más indirectas sean sus relaciones la oración es más difícil de comprender.
Brasil hoy cuenta con una cultura de ciencia, tecnología e innovación consolidada, en expansión.
Sobre la puntuación, recomendamos revisar, sobre todo, los usos de las comas, los puntos y comas y los puntos seguidos. Nuestra propuesta considera utilizar comas dentro de la oración sólo cuando hay conectores, incisos o enumeraciones, punto y coma cuando la relación entre oraciones es directa y punto seguido cuando su relación es indirecta.
Por supuesto, estas son solo recomendaciones y no deben tomarse como normas estrictas a seguir sin consideración alguna.
![]() Foto: Página congresista Tim Walber |
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Para terminar
Esta propuesta está dirigida a los investigadores que tienen poca experiencia en la publicación de artículos científicos y desean publicar en las revistas indexadas del país o en contextos similares al nuestro.
En todo caso, sólo son parcialmente útiles si se trata de publicar en lenguas diferentes al castellano y si la investigación de la que surgió el interés por publicar no tuvo en cuenta unos estándares básicos de calidad (relevancia del problema, especificidad metodológica, validez del análisis de la información recolectada y significatividad de los resultados).
*Arquitecto de la Universidad Nacional, magíster en Educación y Desarrollo Humano de la Universidad de Manizales y el CINDE y candidato a Doctor en Ciencias de la Educación de la Universidad de Caldas.